Busca establecer una relación de entendimiento y armonía con uno mismo y con los otros, siendo la toma de acuerdos y la resolución de los desacuerdos, la base sobre la que se asienta.
Pensamos ,sentimos y actuamos de manera diferente, y, al mismo tiempo, nos movemos y luchamos por satisfacer las mismas necesidades y evitar los mismos fracasos.
El conflicto surge cuando nos confundimos y creemos que hemos de pensar, sentir y actuar de forma igual que los demás y que nuestras necesidades y fracasos son diferentes de las de los otros.
Armonizar esto es el fin último de la COMUNICACIÓN CONCILIADORA.
Para ello recurrimos:
Nos unimos con esto al hilo común de todas las corrientes espirituales, las cuales defienden que “no
habrá paz en el mundo en tanto cada uno de nosotros no cuide su paz interior”.